La Gaceta de Alejandría

¿Te gustaría suscribirte a la Gaceta de Alejandría?

SUSCRÍBETE AQUÍ

María Belmonte Barrenechea

Desde que tengo memoria me recuerdo a mí misma sumergida en un libro. Los libros han sido una parte esencial de mi vida. Nací en Bilbao, he vivido en varias ciudades y en una isla mediterránea. En todos esos lugares me he sentido en casa. Me he hecho nómada. Estudié Historia, Antropología e Idiomas y me gano la vida como traductora técnico-literaria free-lance. Después de tantos años, el oficio de traducir me sigue resultando fascinante. La crisis me ha dejado tiempo libre para poner en orden las libretas que llevo años rellenando. Así surgió mi primer libro Peregrinos de la belleza. Mientras lo escribía soñaba con que lo publicara Acantilado. El sueño se cumplió y la próxima primavera saldrá el segundo. Libros, libros, libros…

Juan Carlos Díez Jayo

Juan Carlos Díez tiene 49 años, es licenciado en Bellas Artes y bilbaíno. Ignora cuál de estas tres características dice más de su persona. Los únicos galones que puede acreditar son los de lector contumaz. Acostumbra a imaginar portentosos argumentos durante el duermevela que siempre olvida en cuanto salta de la cama. Disfruta con el jazz, la siesta y el café solo. De reencarnarse en un perro, sería un perro normal. Si hubiera vivido en la Atenas de Pericles, no habría sido Pericles. Si lo abandonaran en una isla desierta, se llevaría un puente. No sabe bailar ni tiene antecedentes penales. Sospecha que de la Literatura –así, con mayúscula– no se puede vivir, pero que sin ella no merece la pena hacerlo.

Victoria Cirlot

Nunca me autodenominaría escritora. Me siento sobre todo lectora. Mi profesión está en las aulas: allí donde puedo contar lo que he leído. Es a partir de la lectura y de la expresión oral desde donde en todo caso nace mi escritura. Me resisto a situarme en un ámbito concreto de las humanidades y necesito moverme entre textos e imágenes, textos literarios, filosóficos, ensayísticos; imágenes artísticas, sobre todo. Me habría gustado poder traspasar la frontera de las humanidades y llegar a la física, la astrofísica, la historia natural, la zoología, geología, biología… No ha podido ser. Pero dentro de las humanidades, mis libros aspiran a ser interdisciplinares y no sólo llegar a los especialistas sino a cualquier persona culta. Mi trabajo es mi vida.

Gustavo Martín Garzo

José Valdivia Santandreu

Nací en el 59. De niño pasé más tiempo encaramado a las tapias que a ras del suelo; la leche me daba asco, y no me gustaba leer. Pero mi padre ideó un singular y nunca visto plan formativo: que mis tres hermanos y yo, en vacaciones, leyésemos el Quijote. Imagináoslo, al terminar cada curso, amonestándonos con el ardor de un monje dominico en trance de convertir a una tribu de paganos confundidos. Mi aversión a todo lo impreso duró hasta que leí con gusto mi primer libro. Desde entonces, la lectura es una pasión, el varadero donde reparo las averías, el retiro donde encuentro la calma, un acto de rebeldía, y el único ritual al que asisto sin avergonzarme. Gracias a la determinación de mi padre, estudié medicina y leí el Quijote. Y sigo el consejo de Montaigne: leer como liban las abejas, que con el polen de cada flor hacen su propia miel. La leche –en particular, la mala leche-, me sigue repugnando.

Mauricio Wiesenthal

Ignacio de Llorens

Ignacio de Llorens cuando nota que el coraje necesario para emprender nuevas lecturas le abandona, utiliza el manido recurso de escribir, confiando en que el selecto, y por lo tanto reducido, colectivo de lectores, siempre amenazado por los escritores y diezmado por la posmodernidad, sabrá disculpar la traición. Alega en su defensa que hasta el momento ha conseguido refrenar el impulso traicionero evitando que se produjera una estampida de prosa. Como señal de sincera enmienda concluye aquí el presente.

Astrid Colomar

Licenciada en Historia del Arte por la Universidad de Barcelona y diplomada en Bellas Artes por “The Corcoran School of Art” en Washington, DC. Tiene una trayectoria de 20 años como artista plástica a nivel internacional. Ha expuesto en Estados Unidos, Berlín, Italia, China o Suiza. Sus exposiciones recientes en Mallorca han sido en el Museo de Arte Contemporáneo “Es Balauard”, En el Palau Solleric o en el Museo de Arte de Pollença. www.astridcolomar.com